lunes, 23 de diciembre de 2013

"Movilidad sostenible ..." *

Posted: 19 Dec 2013 01:25 AM PST
¿Quién no ha paseado por calles llenas de tiendas en barrios levantados en los años 70 y 80 en las periferias?
Movilidad sostenible La importancia de los locales comerciales 520x347 Movilidad sostenible: La importancia de los locales comerciales
¿Y habéis notado diferencias con las de algunos nuevos PAUs?
2013 11 10 15.18.16 520x292 Movilidad sostenible: La importancia de los locales comerciales
Es evidente, el comercio da vitalidad a las calles, atrae al ciudadano al espacio público y con su presencia retroalimenta una sensación de mayor seguridad. Residentes y visitantes, consumidores o simples transeúntes pasean y se relacionan en calles con elevado número de locales comerciales, mejoran la calidad urbana y por ende la calidad de vida.
Pero además, tiene efectos positivos en la movilidad de las ciudades. Zonas con usos mixtos donde se combina residencia con actividad comercial y económica (oficinas) reduce la movilidad obligada ya que el ciudadano puede localizar en el mismo ámbito su residencia y su puesto de trabajo, o en cualquier caso reducir las distancias de viaje.
Al actuar como foco de atracción, también mitiga los contrastes de tránsito entre primera hora de la mañana, media mañana, hora de comer, tarde y noche… Cuando los vecinos que trabajan lejos ya se han ido abren las tiendas y llegan los consumidores y luego pasa al contrario. Todo ello favorece la sostenibilidad de sistemas de transporte público y otros servicios.
La reserva de espacio para locales comerciales (tiendas, oficinas, etc.) en las plantas bajas de los edificios favorecen la continuidad de los itinerarios peatonales y aminora la sensación de “páramo urbano”. Este efecto se ve aumentado si existen locales comerciales a ambos lados y la calle es peatonal.
Es cierto que algunos nuevos PAUs todavía no se han consolidado y en otros muchos sitios hay locales están vacíos por culpa de la crisis (espiral decadente conocida por el síndrome del comercio vacío), pero en algunos casos ni siquiera se ha dejado el espacio para que existan locales comerciales, por lo que con crisis o sin ella, ahora y siempre,sus calles serán páramos vacíos de gente y de vida.

Fuente: Ecomovilidad.net

sábado, 21 de diciembre de 2013

La visión, mejor sin obstáculos

Según la DGT, entre las 21 horas y las 5 horas de la madrugada se producen, en nuestro país, casi el 50% de los muertos en siniestros de tráfico y eso que la circulación nocturna suele ser más fluida; sin embargo, ante la escasa presencia de vehículos, algunos conductores son propensos a aumentar la velocidad y con ello el peligro y riesgo de sufrir un siniestro.
Pues bien, en términos de ahorro, si la carretera enciende las luces precisas o de mayor ahorro de energía puede que la administración lo note en la factura pero en clave de Seguridad Vial puede que sea más costoso. Es decir, si minimizamos los riesgos de la conducción nocturna con el sistema de iluminación ‘Road Intelligent Lighting’ puede que exista mayor seguridad en las carreteras, especialmente en los tramos iluminados pero al mismo tiempo puede suceder que la visibilidad que ofrece la iluminación artificial incite a los conductores a pisar más el acelerador por la sensación de tener la carretera libre de vehículos y obstáculos.
Otro dato, no menos importante, es si el sistema ‘Road Intelligent Lighting’ detecta la presencia de otros vehículos como, por ejemplo, ciclomotores, bicicletas, vehículos de tracción animal, animales sueltos y peatones. De no ser así, habría usuarios desprotegidos por este sistema y que incluso podría incrementarse el riesgo de atropello, imprevistos en la circulación o cualquier situación de riesgo, debido a la visibilidad que pueda tener el conductor, el alcance del alumbrado de su vehículo y la velocidad a la que circule.
Por tanto, la velocidad no podemos adaptarla solamente a la visión que nos permita un tramo en concreto de la carretera, sino más bien a las circunstancias del momento, a la circulación y proximidad de otros vehículos y usuarios que nos podamos encontrar y, en especial, sobre aquellos obstáculos de la carretera que nos puedan sorprender.

Fuente: Revista Circula Seguro

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jueves, 19 de diciembre de 2013

...no te conviertas en un loco al volante *

Posted: 31 Oct 2013 03:48 AM PDT
Crash Attack - Michelin - Plan joven Seguridad Vial
Michelin ha presentado un ambicioso proyecto a largo plazo dirigido a los conductores más jóvenes, esos que están en la franja de edad de entre 18 y 25 años. El Plan Joven de Seguridad Vial, a través de la campaña Crash Attack pretende hacer llegar a esos conductores la importancia de la seguridad vial a través de unas curiosas experiencias, y mediante una imagen bastante novedosa a la hora de establecer la comunicación.
La seguridad vial es para todos, pero en especial es importante que la tenga presente el colectivo de edades comprendidas entre los 18 y los 25 años, los más jóvenes, los que empiezan a conducir y tienen toda la vida por delante, y no tantas preocupaciones como las personas de algo más edad. Este colectivo concentra no solo la juventud, sino el ímpetu y un cierto sentimiento de “poder” que es necesario, pero que en ocasiones supone tomar riesgos innecesarios al volante.

Imagen retro para una conciencia vial que entre por los ojos

Crash Attack - Michelin - Plan joven Seguridad Vial
La campaña comienza este 4 de noviembre y finalizará en 2015, y en ese camino de tres años se recorrerán un conjunto de universidades seleccionadas en las que se llevarán a cabo las diferentes actividades para que los jóvenes estudiantes experimenten en primera persona, pero sin riesgos, cómo afecta a nuestros reflejos y a nuestras condiciones psicofísicas el alcohol y las drogas, cómo nos protege el cinturón de seguridad y cómo las distracciones nos hacen prácticamente inútiles para cosas tan “sencillas” como la conducción (nótese las comillas en ‘sencillas’, por si acaso aclaro que se trata de ironía total y absoluta).
Serán 20 centros universitarios recorridos en esos tres años, que se dividirán en 5 slots temporales. El primero de ellos será este mismo mes de noviembre visitando las universidades de Almería (4 al 7 de noviembre), León (11 al 14), Valladolid (18 al 21) y Burgos (25 al 28), y posteriormente se confirmarán las universidades que participen en el evento, pero ya se sabe que las fechas serán lo menos intrusivas posible. Serán siempre en los meses de marzo/abril y octubre/noviembre, para coincidir con fechas de poca carga para los estudiantes.
La campaña gira en torno a tres puntos clave de seguridad vial: conciencia sobre el alcohol y las drogas, conciencia sobre las distracciones al volante y conciencia con respecto a la velocidad. Para meterlo todo en un contexto amigable, o al menos más afín a la personalidad de los jóvenes, se ha creado un comic de terror protagonizado por unos “locos al volante” que ponen en peligro su vida y la vida de los demás. La imagen está ambientada en la típica de las películas de serie B de los años 50, y tanto los personajes como la cartelería toman ese inconfundible espíritu.
Las actividades son interesantes también: desde las gafas que simulan un nivel alto de alcoholemia (y que un servidor probó y constató que es como si me hubiese tomado unas cuantas copas de vino, llegando al punto de marearse uno de forma genuina tras llevarlas puestas un buen rato) y que nos hacen difícil cualquier movimiento de cierta precisión, pasando por el simulador de vuelco o el simulador de conducción y el scalextric.
Crash Attack - Michelin - Plan joven Seguridad Vial
El simulador de vuelco nos permitirá experimentar cómo es esa sensación, pero sobre todo nos hará ver con claridad cómo el cinturón de seguridad nos protege, nos sujeta y evita que nos quedemos encajonados en el techo del coche. Es una experiencia muy gráfica, os lo aseguro. Con el scalextric comprobaremos que enviar o leer un whatsapp, recibir una llamada de teléfono o un email significa perder el control del coche, literalmente. Con el simulador (un Mini tamaño real con habitáculo estándar, pero adaptado para “conducir” en una pantalla gigante) veremos que cuestiones como las presiones de los neumáticos, su mantenimiento, el alcohol o condiciones cambiantes de las condiciones de circulación nos obligan a tomar diferentes medidas (en el caso del alcohol, la medida debe ser parar).
También estará presente una carpa con un trivial para poner a prueba los conocimientos que los participantes creen tener, y juntando todas estas actividades en el llamado Pasaporte de Seguridad, los participantes entrarán en el sorteo de la matrícula anual en la Universidad (con un importe máximo de 1.500 euros), un incentivo que seguro interesará a muchos jóvenes, y con razón. Con todo, la campaña esperamos que sea un éxito de participación y se consiga meter un poco la patita en un colectivo complejo, poco accesible y algo permeable a las campañas de seguridad vial, aunque paradójicamente deberían ser uno de los grupos más concienciados al respecto.

Fuente: Revista Circula Seguro

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miércoles, 18 de diciembre de 2013

¿HAY DINERO PARA TENER CARRETERAS SEGURAS?

Posted: 10 Sep 2013 01:29 PM PDT
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La disputa sobre quién tiene más responsabilidad en los siniestros viales, si “las infraestructuras” (que no tienen culpa porque no tienen vida, ni mala idea), o los conductores, es eterna. No creo que haya nunca una solución, así que lo mejor es no entrar en esa discusión, porque ya se sabe que si un problema tiene solución no hay por qué preocuparse, pero si no la tiene, pues tampoco.
Lo que sí podemos vislumbrar es cuánto dinero haría falta en España para dejar las carreteras más seguras, o al máximo nivel de seguridad. Porque si hacemos la proporción de lo que se va a destinar en Extremadura a mejorar la señalización en las carreteras de la región, nos podemos echar a temblar.

¿Casi un millón de euros en concurso público para mejorar señalización?

En realidad no solo es señalización, pues se pretende mejorar la seguridad vial en las carreteras de forma general. Lo que pasa es que en su mayor parte serán señales verticales, hitos y captafaros, y también las barreras de seguridad. Esto es una buena noticia para las motos, pero una mala noticia para quienes esperamos que se ponga un presupuesto digno al servicio del mantenimiento de las vías.
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Casi un millón de euros, concretamente 968.000 euros, es lo que se va a destinar a mejorar las vías en las zonas de conservación de Coria-Plasencia (Cáceres), Cáceres-Trujillo (Cáceres), Badajoz-Mérida y Zafra-Castuera (Badajoz). Imaginad cuánto haría falta para hacer lo propio en toda España. Y para adecentar el firme en las carreteras secundarias o de menor categoría todavía, para mejorar la seguridad en las ciudades, para… la lista es inmensa.
En los presupuestos generales del Estado se destinaron, en 2012, algo más de 11.928 millones de euros a temas de infraestructuras (mejor dicho, lo que estaba destinado para Fomento). Esto no significa que sea para la red viaria, de hecho lo fue el 26,5%, 3.160 millones. Eso supone aproximadamente la mitad del presupuesto dedicado al ferrocarril, y aproximadamente un tercio de lo que lleva perdido tirado a la basura invertido España mientras intenta “ganar” los Juegos Olímpicos.
Es muy instructivo saber cómo se planeó gastar todo ese dinero en las carreteras españolas, veamos:
  • Un 4% se destinó a “Convenios con otras administraciones” (129 millones).
  • Un 9% se destinó a “Concesiones” (290 millones).
  • Un 19% para “Expropiaciones” (600 millones).
  • Un 28% para “Conservación” (873 millones).
  • Un 40% para “Construcción” (1.268 millones).
Dentro de esa “conservación” tenemos de todo, pero sin especificar de forma global (al menos hasta donde yo he podido ver): marcas viales, señalización vertical, túneles, márgenes de carreteras, firme, balizamiento, mejoras en accesos… Si tenemos en cuenta que el presupuesto baja y baja cada año, nos daremos cuenta de la cantidad de dinero necesario para mantener nuestras carreteras como si fuesen nuevas. Y ese dinero no lo tenemos ahora, y por eso las carreteras están como están.
Fotos | M.Peinado (1|2)
La entrada ¿Cuánto dinero hace falta para tener las carreteras más seguras? aparece primero en Circula Seguro.
Posted: 10 Sep 2013 11:05 AM PDT
infractor
Vehículo estacionado en acera y paso de peatones. Su conductor: ausente
En primer lugar, no quiero con este artículo que se denuncie a toda criatura viviente que cometa una infracción pues todos somos humanos, nada perfectos y alguna vez que otra, incluido el que suscribe, cometemos errores; pero dentro de la imperfección hay comportamientos que se pueden evitar incluso después de cometer cualquier infracción de tráfico si el infractor está siendo observado e incluso es advertido de un hecho que, según la Ley de Seguridad Vial, puede ser leve, grave o muy grave.
Dicho esto, debemos saber que uno de los derechos que podemos ejercer como ciudadanos es el de formular una denuncia de forma voluntaria y que consiste básicamente en molestarse en tomar nota de la matrícula del vehículo que ha cometido la infracción, modelo, color y lugar exacto donde ha tenido lugar el hecho y que puede ser motivo de sanción por parte de las Autoridades de tráfico, para después dar cuenta a sus Agentes o bien a través de las Jefaturas Provinciales de tráfico. Pero, veamos más detalles.

La denuncia voluntaria sobre una infracción de tráfico

Artículo 4 Denuncias de carácter obligatorio y voluntario
1. Los agentes de la autoridad encargados del servicio de vigilancia del tráfico deberán denunciar las infracciones que observen cuando ejerzan funciones de vigilancia y control de la circulación vial.
2. Cualquier persona podrá, igualmente, formular denuncias por hechos que puedan constituir infracciones a los preceptos del texto articulado de la Ley sobre tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial o de sus Reglamentos.
Si el hecho ocurre en casco urbano es necesario tomar nota de la calle del municipio que sea, incluso el número del portal y si está dicho inmueble delante o frente al vehículo denunciado. Algunos pensarán que es demasiado complicado ejercer este derecho pero la forma de proceder, aportando todos estos datos, serán necesarios para que la denuncia se tramite; ya que mientras más detallado sea el relato y los datos que se aporten, mucho mejor para que se inicie el procedimiento sancionador.
Por otro lado, es conveniente avisar o esperar a que pase por el lugar del hecho algún policía local si estamos por casco urbano, y si es en carretera, Guardia Civil o Policía Autonómico si tiene competencia en materia de vigilancia del tráfico y manifestarles nuestro deseo de formular una denuncia voluntaria. Digo esto porque será más fácil, sin necesidad de desplazarnos y para evitar tener que buscar testigos (si alguien se ofrece voluntariamente pues su testimonio dará mucha más credibilidad al hecho) o pruebas del hecho denunciado como, por ejemplo, fotografías.
Artículo 5 Contenido de las denuncias
En las denuncias por hechos de circulación deberá constar: la identificación del vehículo con el que se hubiese cometido la supuesta infracción, la identidad del denunciado, si fuere conocida, una relación circunstanciada del hecho, con expresión del lugar, fecha y hora y el nombre, profesión y domicilio del denunciante. Cuando éste sea un agente de la autoridad podrán sustituirse estos datos por su número de identificación.

¿Quién es el perjudicado: el denunciante o el denunciado?

Pues bien, tanto si contamos con la presencia de agentes de tráfico, decidimos acudir a sus dependencias policiales o a la Jefatura Provincial de Tráfico, tenemos que acreditar y aportar nuestro documento nacional de identidad y explicar de forma clara y concisa el hecho que queremos poner en conocimiento de las Autoridades de Tráfico para que se inicie el expediente sancionador y en donde nosotros, a efectos legales, figuraremos como denunciantes durante la tramitación y resolución de la denuncia.
Por supuesto, no todo es denunciable, habrá hechos que aunque estén contemplados como infracciones pueden realizarse de forma voluntaria o de alguna forma justificada, ni tampoco vamos a meternos en el papel de vigilantes de la vía pública porque ese es, precisamente, entre otros, el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad pero habrá situaciones que nos veamos como perjudicados, como, por ejemplo, ante una infracción grave al Reglamento General de Circulación cometida por otro conductor y que haya puesto en peligro nuestra vida, observar una imprudencia de tráfico o una infracción que altere nuestra movilidad como peatones como, por ejemplo, circular en sentido contrario, saltarse un ‘stop’ o semáforo en rojo, estacionar frente a la puerta de un inmueble o domicilio, paso de peatones, carril bici, etcétera.
Artículo 7 Requisitos de las denuncias de carácter voluntario por hechos de circulación
a) La denuncia podrá formularse verbalmente ante los agentes de vigilancia del tráfico más próximos al lugar del hecho, o por escrito dirigido a la Jefatura de Tráfico o a la Alcaldía del lugar de la infracción, según ostente una u otra la competencia para instruir el expediente.
b) Se harán constar en la denuncia los datos y circunstancias que se consignan en el artículo 5 del presente Reglamento.
c) Si la denuncia se presentase ante los agentes de vigilancia del tráfico, se formalizará por ellos el reglamentario boletín de denuncia, en el que se hará constar, además de los requisitos consignados en el apartado anterior, si personalmente comprobó o no la infracción denunciada, así como el nombre y domicilio del particular denunciante, remitiendo el boletín a la Jefatura de Tráfico o Alcaldía competente para su tramitación, sin perjuicio de entregar un duplicado al denunciado si fuere posible.
En resumidas cuentas, pienso que si todos colaboramos, asumiendo y reconociendo nuestros errores y, sobre todo, empatizando con los demás, creo que la vida nos resultaría más fácil como, peatones, conductores y usuarios de la vía pública. ¿No os parece?

Fuente: revista Circula Seguro

EN BOYACA: OBSERVAMOS LA SEGURIDAD VIAL
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jueves, 12 de diciembre de 2013

CAMBIAR O MORIR EN MOTOCICLETAS

Sergio de J. Ojeda Gómez
Abogado
Director del Centro Integral de Atención -
Instituto de Tránsito de Boyacá


NADIE, NI USTED MISMO ADMIRADO MOTOCICLISTA, PUEDE QUERER QUE ESTO SUCEDA PERO OCURRE Y CON ALTA FRECUENCIA. Grávese estas pautas indeseadas por muchos: PARA MORIR O ACCIDENTARSE EN LA VÍA exceda la velocidad, no respete las señales de tránsito, no respte los semáforos, transite por el carril de alta velocidad, adelante a otros vehículos donde quiera, no se ponga el casco protector,  no prenda las luces y no indique cambios de dirección, desconecte el sileciador, desafíe o agreda a los demás usuarios de la vía, no se oriente por los espejos retrovisores, CONDUZCA BAJO EFECTOS DEL ALCOHOL, desordene el transito vehicular, MÉTASE POR DONDE PUEDA, NO GUARDE TURNO EN LOS CARRILES, ETC.

El conocimiento permitió mejorar y crear medicamentos, comunicaciones, transportes, tecnología, contar con mejores productos y servicios, disponer de información (fiable) que nos condujo a tratar de facilitar mayores niveles de seguridad vial y, por ende, a disponer de comodidades que en su conjunto elevaron el promedio y calidad de vida.

Medicina Legal y Ciencias Forenses recopila y procesa la estadística Colombina y en su publicación Forensis  señala, entre otros aspectos, que “El vehículo involucrado con mayor frecuencia en accidentes de transporte con lesionados o fallecidos, fue la motocicleta, y en segundo lugar estuvo el automóvil..” durante el año 2012 se presentó un aumento de 6,2 % de muertes con respecto al 2011.

En cuanto a la condición de la víctima, persistió en primer lugar el conductor, con aumento del número de casos tanto de lesionados como de fallecidos con respecto al año anterior. En el caso de los pasajeros y peatones, ocuparon el segundo y tercer lugar respectivamente.

Me resisto a creer que este valioso conocimiento sobre la realidad nacional en materia de accidentalidad (causas) se deje solo en una publicación, al igual que los números sobre muertos, heridos y perdidas económicas de los colombianos; insensato seria no sacarle provecho a las experiencia reflejadas en la estadísticas que año a año recopilan y publican quienes apuestan por mejorar la seguridad vial. Debemos sacar el lado positivo a las experiencias funestas, dolorosas, tristes que motociclistas y sus familias sufrieron en años anteriores y que continuarán castigados en el presente y futuro si no mejoramos todos nuestra cultura vial para asumir responsabilidades serias respecto al valor de la vida y para cambiar la forma de pensar y las conductas sobre la vía. 

Teniendo la certeza que el grupo de actores del transito más vulnerables son los motocicletas, al participar en el 45% de todos los accidentes de tránsito registradas en Colombia, surge la inquietud; si los accidentes de tránsito se producen u ocasionan por unos gustos y valores desenfocados, por patrones de conducta negativas repetitivas poco prudentes ¿por qué no nos proponemos lograr un cambio de conductas indivuduales y colectivas favorables en términos de seguridad?

Acudiendo a la praxis se puede afirmar que el problema radica en la falta de conciencia, pues nuestros hábitos por lo general son automáticos, no nos cuestionamos si los gustos, valores, convicciones, forma de pensar y actuar son o no seguros. La apuesta seria simple: sino no queremos ser una estadística más, debemos comenzar a cambiar nuestros comportamientos, por unas conductas diferentes, equilibradas, socialmente aceptadas por ser conductas seguras en nuestras vías y vidas, al punto que los hábitos del
día a día (Cultura) nos permitan alcanzar o conseguir resultados satisfactorios sostenidos y crecientes.

Cuánto daríamos por devolver el tiempo y recoger nuestros actos inseguros que dejaron consecuencias indeseables para propios y extraños, y madurar a tiempo, por comprender y valorar la vida propia y la de los demás, de tal forma que reclamamos la ductilidad del conductor en el buen sentido de la palabra, para que impere el sentido común y obedezcamos las normas de tránsito y de comportamiento que según la estadística indican que la juventud, en sus comportamientos irreponsables (inmadurez), mata. En el rango de los 18 a 39 años está el mayor número de víctimas por realizar conductas real o potencialmente peligrosas, que, por su puesto, están previstas como infracciones en el manual que tipifica la conducta de los actores en la vía.

Mientras disminuye la venta de otros vehículos automotores, se incrementó el número de nuevas motocicletas con 572.584 unidades que se incorporaron en el año 2012 al caótico tráfico automotor
de las ciudades; esto permite suponer mayores cifras en materia de accidentes de tránsito y sus
correspondientes consecuencias en materia de salud pública especialmente (Fuente Fenalco). 

De las diferentes campañas preventivas (publicidad) dirigidas a los motociclistas queda muy poco, pues a muchos de ellos parece interesante la sensibilización en el momento, pero dados los comportamientos en vivo pareciera que se "sembró en el desierto", pues no es difícil percibir que buena parte de los conductores de motocicletas tienen deficiente conocimiento, pericia y prudencia que se requieren para el ejercicio respònsable de la conducción. El afán que nos inventamos, el pretexto diario de que "nos cogió la tarde" llevan a a superar los límites de velocidad reglamentarios y/o velocidad promedio, a adelantar en lugares prohibidos, etc. ; vamos tan afanados que no nos queda el tiempo para abrocharnos el casco, prender la luz, esperar el cambio del semáforo; tan ciertos son los afanes "inventados, provocados o espontáneos" que estando bajo los efectos del alcohol "no queda tiempo" para esperar que un taxi nos lleve a la casa y terminamos conduciendo la motocicleta por capricho personal y, con alta frecuencia, generando lesiones personales, homicidio y, en últimas, perdiendo hasta la vida propia, la libertad, la salud.

Para ser justos, no son exclusivamente los motociclistas los que transgreden las normas de tránsito y por ello terminan accidentados; son ellos, sin lugar a dudas, quines requieren mayor atención institucional y de sensiblizacvión hacia la cultura vial por ser los más vulnerables sobre las vías públicas.

La próxima entrega se dedicará a tocar el tema de las infracciones a las normas de tránsito por
parte de los motociclistas y sus efectos legales. Hasta pronto.

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martes, 10 de diciembre de 2013

LA CONDUCCIÓN VEHICULAR BAJO LA LLUVIA*

Posted: 21 Oct 2013 02:28 AM PDT
La tercera oportunidad
Seguimos con nuestro especial ‘La tercera oportunidad‘, una forma particular de revisar lo que nos contaban en el veterano ‘La segunda oportunidad’, y en esta ocasión nos vamos a referir a conducción y la lluvia. Como es lógico hablaremos de adherencia, de neumáticos, de frenos y de prudencia y sentido común.
El exceso de confianza, la mala utilización del freno y unas condiciones de visibilidad malas desembocan en una más que previsible colisión en una carretera secundaria. La clave del vídeo está en qué hacer para evitar ese problema gracias a la segunda oportunidad televisiva.


¿Cómo se trata el tema hoy en día? En principio, todo lo que se dice en el vídeo sigue vigente: la adherencia y capacidad de frenado es muy superior en seco que en mojado, y muy superior, en cualquier caso, con neumáticos en buen estado. La prueba que se hizo en el Jarama se hace hoy en cursos de conducción segura, y los resultados son equivalentes.
Digo equivalentes porque el “equipo” ha mejorado considerablemente: neumáticos, suspensiones, sistema de frenado (ABS), controles electrónicos de estabilidad (ESP)… todo ello contribuye hoy a una frenada más segura, estable y eficaz, reduciéndose las distancias de frenado con holgura.
Eso no quiere decir que hoy lo tengamos más fácil. Se circula a velocidades importantes igualmente, y a lo mejor el refuerzo que tenemos mediante la electrónica nos hace creer que estamos más seguros que hace 40 años, cosa que es cierta gracias al batallón de sistemas de seguridad activa y pasiva.
El ABS ya se encarga de realizar una frenada intermitente y continua, para que los neumáticos no se bloqueen. Seguramente es el mayor avance de cara a conseguir que un conductor al azar haga una verdaderamente buena frenada en condiciones adversas. Las suspensiones, los neumáticos modernos con mayor capacidad de evacuación de agua y los frenos más potentes ayudan a reducir la incertidumbre ante una situación de riesgo.
Lo que no cambia es el concepto: en agua debemos circular con una “holgura de seguridad”. Si la distancia de seguridad que mantenemos normalmente es de 50 metros, en agua debemos aumentarla hasta tener visibilidad perfecta y, sobre todo, para asegurarnos de poder reaccionar con celeridad. No podemos apostarlo todo a los sistemas de seguridad cuando está en nuestras manos circular con cabeza.

* Fuente: Revista Circula Seguro

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miércoles, 4 de diciembre de 2013

¿QUIÉN GENERA LOS TRANCONES?

Sergio de J. Ojeda Gómez
Abogado
Director del Centro Integral de Atención - C.I.A.
del Instituto de Tránsito de Boyacá - ITBOY

Tunja, 04 de diciembre de 2013
La pregunta de muchos colombianos (pasajeros, conductores, peatones, visitantes, periodistas, ingenieros y analistas) frente al problema de los infartos viales o trancones de todos los días, es si la Constitución Política de Colombia privilegió el derecho a circular libremente por el territorio nacional ¿ por qué esta disposición del más alto nivel se tornó en la excepción?
Cuando la Constitución Política señaló que Colombia es un Estado social de derecho dió una connotación especial en el sentido de establecer que las instituciones y las autoridades están al servicio del ciudadano, con la posibilidad de participar en las decisiones que puedan afectara la comunidad; entonces, el interrogante a formular es ¿por qué no se nos pregunta si consentimos que cada rato nos cierren las vías?
Si autoridades locales tienen la obligatoriedad legal y social de desarrollar e implementar una política pública vial para mejorar la movilidad y disminuir los accidentes de tránsito, se crearon o trasformaron entes administrativos encargados del tránsito y del transporte en Secretarías de Movilidad y de la existencia de unas dependencias  responsables de la infraestructura vial, del control y vigilancia, etc. No se entiende el por qué no se resuelve el problema diario de obstrucción de la movilidad.
Ante esa problemática es necesario preguntarnos ¿quién genera la inmovilidad cotidiana en las ciudades especialmente? Al respecto podemos generar varias respuestas que con seguridad no nos gusten mucho, así:
Los alcaldes no gestionan ni invierten recursos suficientes en control y vigilancia, en  mantenimiento, mejoramiento, acondicionamiento, creación, recuperación, señalización y demarcación de la malla vial que tiene  un rezago  importante reconocido  oficialmente.
Algunas autoridades municipales no dan aplicación especial al mandato constitucional de los artículos 1, 2, 24, 82, 209 entre otros de la CPC y que se refieren  a promover la prosperidad general, a la protección de la vida, la salud, la convivencia pacífica, el medio ambiente, los recursos naturales, y que la función administrativa está al servicio del interés general; lo anterior, ligado necesariamente a la problemática de la seguridad y movilidad vial.
La afirmación obedece a que por ejemplo se colocan una valla, conos, cintas cerrando las vías por horas por acciones de particulares- contratistas,  conforme a su necesidad particular sin que la autoridad tome acciones en el hecho. También algunos señores alcaldes o agentes de tránsito o policía de tránsito cierren la vía por horas para evitar el trancón en un punto, pero desconociendo que el problema solo se trasladó con una cantidad de efectos negativos.
Una posibilidad sería que medie acto administrativo escrito que corresponda a un estudio técnico, de impacto económico, social, ambiental y de la salud de los ciudadanos, que se divulgara  previamente a la ciudadanía por los diferentes medios de comunicación y que ciudadanos puedan interponer los recursos que por vía gubernativa se pueden presentar contra la decisión administrativa de otorgar permisos para el cierre de vías; si la decisión queda en firme se señalicen técnicamente las vías a intervenir, se diseñen y ejecuten medidas para mitigar el problema ocasionado (planes de manejo de trafico) etc.
Por carencia de acto administrativo se olvida que se requiere una motivación fáctica y jurídica seria, en la que se demuestre que el tiempo de cierre de la vía es el estrictamente necesario para ejecutar la obra o  realizar cualquier evento;  que los días de la semana son los que menos perjudican a la ciudadanía, que el horario es el más adecuado, que el impacto social es mínimo al igual que la afectación a derechos fundamentales de los colombianos. Sería bueno pensar que muchos trabajos se pueden realizar por ejemplo en épocas de verano, en las noches, en los días festivos cuando en el municipio se genera una baja  demanda del uso de la vía,  etc.
Los cierres de vías se dan por múltiples situaciones, entre otras por decisión unilateral de los señores alcaldes para atender algunas obligaciones propias del cargo  como son el arreglo de las vías y su señalización, temas de alcantarillado, acueducto y demás redes de servicios públicos. El problema del infarto vial o trancones en la vía pública también radica en los malos hábitos de la sociedad y en el entendido que le dan las autoridades al mandado constitucional del artículo 209 que prescribe “La función administrativa está al servicio de los intereses  generales…”
Recabando, para varios entes y/o funcionarios administrativos prima la necesidad o interés de algunos grupos de interés particular sobre la sociedad en general. Me explico, el cierre de vías se da a solicitud de parte, es decir para realizar eventos deportivos como la marcha atléticas, maratones, ciclísticos, patinaje, automovilismo, motociclismo, el triunfo o bienvenida de un colombiano etc.; también, para realizar eventos comerciales como las caravanas realizadas por almacenes de tamaño medianos, de cadena, o grandes superficies, concesionarios de vehículos, de comunicaciones etc. que promocionan su creación, la llegada al país, un nuevo  producto o el cumpleaños; procesiones religiosas, el cumpleaños de instituciones educativas , culturales, reinados de belleza, desfiles militares, políticos, paros, huelgas de cualquier sector  etc.
De esta forma tanto las autoridades, como la ciudadanía hacemos inoperante el derecho fundamental a circular libremente.
Es necesario entender que todos ellos también tienen sus derechos, pero que no son del interés general de un municipio o departamento, de tal forma que incluso para autorizar un evento de esta naturaleza se debería hace una medición del impacto positivo o negativo  de cómo impacta el bienestar general, la productividad, el medio ambiente, de tal forma que se puedan pesar en una balanza y establecer si es viable o conveniente otorgar o no otorgar un permiso para el cierre de una vía.
La realización de eventos sobre las vías públicas es parcialmente aceptada por la ciudadanía; pero considero que algunos de ellos se pueden realizar en otros escenarios. 
Si no cambiamos nuestra forma de pensar, entender y actuar como personas y como conglomerado social responsable podríamos dejar de criticar y de esperar soluciones únicamente de parte de las autoridades, pues, como lo repito, el Estado lo conformamos todos los colombianos y, desafortunadamente, todos aportamos para que este caos vial se presente día a día o debemos aportar para que se ejecuten soluciones coherentes y consistentes.
Para finalizar, sugiero que se cuente la cantidad de eventos que se realizan sobre las vías públicas, se encueste al ciudadano sobre la aprobación o no de estos eventos que limitan el derecho de las mayorías a circular libremente, se pregunte a los viajeros como se sienten cuando no pueden continuar el viaje. Se habría pensado en las personas que no pueden llegar a ser atendidos oportunamente por un médico, a clase, a trabajar, a atender una emergencia, se pregunte ¿cuánto pirerde (o “gana”) la ciudadanía en términos de calidad de vida?, ¿cuánta contaminación ambiental se produce con el infarto vial?, ¿cuántos recursos naturales renovables o no se queman en el trancón?, ¿Cuántas personas  salen a disfrutar del evento?, las pérdidas de los comerciantes, la cantidad de dinero que se quema en combustible, el estrés que se genera etc.
Como es natural estas no son las únicas causas que generan el infarto vial. En otras oportunidades nos cuestionaremos sobre aspectos técnicos, de conducta social que requieren ser considerados para mejorar la movilidad y con ello la convivencia responsable y pacifica.
De antemano me disculpo por las susceptibilidades que pueda herir, pero esa no es mi intención. Hasta pronto.  
¡EN BOYACA!: Observamos la Seguridad vial